17 de noviembre de 2011

MEMORABILIA GGM 534

ELPAÍS.COM
Madrid – España
17 de noviembre de 2011


El archivo de la 'superagente'

Los secretos de la Mamá Grande

Las 2.000 cajas con los papeles de Carmen Balcells, por las que Cultura pagó tres millones de euros, resumen la historia de la literatura en español del siglo XX

TEREIXA CONSTENLA - Madrid - 17/11/2011


Ella les hizo gigantes literarios y ellos la convirtieron en superagente. Carmen Balcells (Santa Fe de Segarra, Lleida, 1930) posee puesto fijo en la historia de la literatura mundial. Tiene en cartera más premios Nobel que dedos en la mano (Mario Vargas Llosa, Gabriel García Márquez, Camilo José Cela, Pablo Neruda, Miguel Ángel Asturias y Vicente Aleixandre). El boom latinoamericano estalló en su agencia. Fichó a escritores españoles (Miguel Delibes, Ana María Matute, Juan Marsé, Manuel Vázquez Montalbán...) cuando aún no habían adquirido la condición de clásicos del siglo XX. Son vagas pinceladas que dan idea de la trascendencia de la documentación almacenada en la agencia de Carmen Balcells desde 1960, comprada por el Ministerio de Cultura en 2010 por tres millones de euros y que ahora ve la luz.

 Carmen Balcells
  
"Contrariamente a lo que parece, a la hora del 'business' soy implacable"
 Ella desterró los contratos vitalicios con editoriales y las bajas liquidaciones


El archivo, compuesto por cerca de 2.000 cajas (alineados: 2,5 kilómetros de documentos), está depositado desde entonces en el Archivo General de la Administración (AGA) de Alcalá de Henares, aunque su futura ubicación está en el aire. El actual Gobierno pretendía poner en pie un centro nacional dedicado a la creación, edición e industria editorial a partir de este fondo. La Generalitat catalana, por su parte, pugna por el regreso a Barcelona de las cajas que almacenan la historia de la agencia y sus más de 200 escritores.

EL PAÍS ha sido el primer medio que ha accedido al contenido de la correspondencia, los originales literarios y sus sucesivas correcciones, las liquidaciones de derechos de autor o los borradores de obras de escritores que deseaban ser representados por su agencia. El fondo, que incluye la biblioteca de Miguel Ángel Asturias y el archivo de Paul Bowles, aún no se ha abierto a la investigación porque está pendiente de ser reclasificado y ordenado según los parámetros archivísticos.

Sumergirse en páginas amarillentas y cajas hinchadas sirve para constatar lo previsto: Balcells ha sido todopoderosa en el mundillo editorial, un pulpo con tentáculos en cada país. La única española que podría tutear a Andrew Wylie, El Chacal, considerado el número uno del gremio. Mucho antes que Wylie, ella ya mereció la etiqueta de "superagente literaria" por el añorado editor Carlos Barral. Se labró el respeto de los autores desde que, en 1954, comenzó a trabajar en la agencia del escritor rumano exiliado Vintila Horia.

Ella les colocó en el centro del negocio y combatió abusos de las editoriales: desterró los contratos vitalicios e impuso cláusulas de cesión por tiempo ilimitado. Ya en mayo de 1961, Miguel Delibes elogiaba así su papel: "Conozco la gran eficacia de su agencia y confío en que este contacto pueda ser beneficioso para ambos. Por de pronto, mis asuntos en Italia, por lo que se refiere a algunos libros, están bastante embrollados debido a la poca seriedad de algunos editores".

Los escritores confiaron en ella y ella continuó creciendo. "Mamá Grande", la llamó Gabriel García Márquez, coronándola como el personaje literario de uno de sus cuentos. La liberadora de autores, según Manuel Vázquez Montalbán: "Hasta ella, los escritores firmaban contratos vitalicios con las editoriales, percibían liquidaciones agonizantes y a veces, como premio, recibían algunos regalos en especie, por ejemplo, un jersey o un queso Stilton".

Es cierto. Está en los escritos. Balcells era atronadora con las editoriales. A Bruguera, el 26 de octubre de 1982: "Recibido tu télex acerca de la reedición de El otoño del patriarca, de García Márquez, en Club Bruguera: no estamos en absoluto de acuerdo y no aceptamos esta propuesta. Tanto García Márquez como Cela deberán percibir sus derechos íntegramente, como está previsto en los contratos. Y no la mitad. s que los fabricantes de papel os regalan la mitad para promociones?". A la editorial Losada, de Buenos Aires, el 16 de julio de 1979: "Lamentamos tener que comunicarles que si la próxima semana no tenemos constancia de su giro por todas las sumas pendientes consideraremos rescindidos los contratos Rafael Alberti. Stop. Ustedes comprenderán que hemos insistido y esperado todo lo que era posible tratándose de este autor. Stop".

Ella misma se definía así en una carta al chileno José Donoso el 29 de marzo de 1972: "La reacción de [Carl] Brandt me parece pálida con respecto a la que hubiera tenido yo. Mi relación con [Manuel] Puig, [Ernesto] Sábato y otros ha terminado como la de Brandt contigo y contrariamente a lo que parece por el tono festivo que mantengo con mis representados, a la hora del business soy implacable". Donoso, que le envía largas cartas plagadas de cuitas familiares y económicas, la llama en una "ángel tutelar, gallina clueca y musa de la literatura contemporánea".

Cuando fichó a Graham Greene para vender El factor humano en España desplegó la artillería en cuanto apreció reticencias en las editoras argentinas que hasta entonces, 1978, tenían los derechos de difusión en español: "Me permito reiterarles a ustedes, porque al parecer no ha quedado suficientemente claro en nuestra comunicación anterior, que siguiendo los expresos deseos del señor Graham Greene se ha procedido ya a la división del mercado para esta obra".

Toda la furia que podía caer sobre una editorial incumplidora se transformaba en comprensión con un escritor atascado. Balcells fue una de las principales animadoras de la ruptura de Mario Vargas Llosa con los trabajos alimenticios y su traslado a Barcelona. A Ana María Matute la arrancó de una depresión y le facilitó el soporte afectivo para acabar su aclamada novela Olvidado rey Gudú. A muchos les adelantó dinero para que se olvidasen de lo prosaico y se centrasen en lo lírico. A Cela le gestionó actividades muy bien remuneradas en su última etapa, cuando la literatura parecía relegada ante la caja registradora.




** ** **

ELPAÍS.COM
Madrid – España
17 de noviembre de 2011


REPORTAJE: El archivo de la 'superagente'

En el epicentro del 'boom'


Encendidas expresiones de amistad, confesiones y luchas de egos salpicaron siempre la relación de Balcells con las mejores plumas de América Latina

TEREIXA  CONSTENLA - Madrid

 Sus talentos explotaron más al unísono que sus formas y sus ideas. El caso es que se convirtieron en uno de los fenómenos literarios cumbres del XX: el boom latinoamericano. En el epicentro estaba la catalana Carmen Balcells. Un solo nombre, Gabriel García Márquez, le habría bastado para enriquecerse y hacerse un hueco en la historia. Pero Balcells tuvo el olfato de ficharlos a casi todos: Mario Vargas Llosa, Pablo Neruda, José Donoso, Augusto Monterroso, Miguel Ángel Asturias, Isabel Allende, Mario Benedetti, Julio Cortázar, Jorge Edwards, Juan Carlos Onetti o Augusto Roa Bastos. Entre las referencias a derechos, tiradas y proyectos, los escritores van desgranando en sus cartas grandezas y miserias.

 

MARIO VARGAS LLOSA "Harto de dar clases"
El 24 de marzo de 1970, el peruano Vargas Llosa nombra agente a Carmen Balcells. Antes ya mantenían un contacto fluido, a tenor de las desnudas confidencias que le hace el escritor, frustrado por no poder dedicarse en exclusiva a escribir. "Ocurre que cada día estoy más harto de dar clases y de vivir como un gitano, y cada día más dispuesto a llegar al asesinato para poder mandar al diablo los trabajos alimenticios y dedicarme solo a escribir", le contaba desde Puerto Rico el 25 de marzo de 1969.

Tras haber publicado La ciudad y los perros (1963), traducida casi de inmediato a una veintena de lenguas, y La casa verde (1966), Vargas Llosa se enfrenta a una de las peores calamidades de un novelista en mayo de 1969. "Ocurrió una espantosa tragedia. La mitad de la novela que debía estar ya en manos de Carlos anda extraviada en algún lugar del mundo por culpa de una irresponsable azafata de Eastern Airlines. Tengo otra copia felizmente pero tú imagínate si con este precedente me voy a atrever a empaquetarla y despacharla. Fuera de eso me parece de mal agüero que el manuscrito esté siendo manoseado y ojeado por forasteros". Lo más factible es que se trate del texto de Conversación en La Catedral, publicada ese mismo año y a la que alude reiteradamente en las cartas enviadas a su agente durante 1970 desde el King's College de Londres. Poco después se escinde Seix Barral. Vargas Llosa tiene claro a qué bando apuntarse: "Yo fui publicado gracias a Carlos, y a su empeño y a su fe en mí se debe en gran parte lo que les ha ocurrido a mis libros". Es un año vital para el peruano: "No olvides que he renunciado al Kings y que a partir de julio dependo solo de los libros para sobrevivir".

GABRIEL GARCÍA MÁRQUEZ Robo en el hotel
Es probable que la estrecha y larga amistad entre el Nobel colombiano y la agente catalana haya dado más de sí de lo que figura en el archivo vendido a Cultura. Balcells se ha reservado originales de libros y cartas que estima demasiado como para deshacerse de ellos. Eso puede explicar la escasez de cartas personales entre ambos existentes en las cajas de Hispanoamérica, pese a la abultada correspondencia profesional que se genera entre ambos debido al éxito mundial de las novelas de García Márquez. En la agencia se va creando la llamada biblioteca secundaria de García Márquez: 700 cajas con ejemplares de todas las ediciones de sus obras en el mundo. Balcells le informa el 23 de agosto de 1973 de la mudanza de la oficina. "He tomado la decisión de cambiar de oficina y tengo un tembleque incontenible de haber tomado una decisión de tal naturaleza sin tu bendición. Desearía que pudieras ver el piso y saber si te gusta". Le pide "como favor especial" que lea la novela de Luis Goytisolo, Recuento. "Si te gusta te pediré una frasecita...". La agencia gestiona las innumerables invitaciones que recibe el escritor, parte de las cuentas y tarjetas y, por supuesto, todos los negocios relacionados con los derechos de autor. En el archivo se pueden leer también detalles del robo que sufrió el escritor el 14 de octubre de 1985 en el hotel Princesa Sofía de Barcelona. Su esposa, Mercedes Barcha, presenta una denuncia en comisaría, por la sustracción de anillos, collares, pendientes, un bolso de viaje con pasaportes (recuperados finalmente) y una caja con 10 discos de computadora con la última novela inédita, sin corregir, del Nobel. El valor de lo robado es de ocho millones de pesetas. Desde la agencia se envían libros al escritor durante sus estancias a La Habana. Uno de los lotes: Orlando, Memorias de Adriano, Biografía de Lorca (Gibson), Vidas de filósofos de Diógenes Laercio. Hay notas manuscritas de Gabo y de su esposa, que las firma como "Gaba".

PABLO NERUDA "Ese editor sueco es un fresco"
El poeta chileno da poderes a Carmen Balcells el 29 de octubre de 1971. Mientras ocupa la embajada en París, parte de la correspondencia se realiza a través de su secretaria. A través de ella escribe el 18 de noviembre de 1971: "Estimada señora Balcells: Me es muy grato dirigirme a usted por encargo del señor embajador para decirle. 1. Que el adelanto le parece exiguo. 2. Que la cláusula sobre ediciones fuera de USA no debe incluir cesión de derechos ni pagar a la editorial". En diciembre de ese año, la agente le informa de que Tàpies ilustrará una edición de Veinte poemas... Neruda es consciente de los enredos de su representación. En una carta manuscrita desde su refugio en Normandía admite el 6 de marzo de 1972: "Ya sé que mi representación te da incalculables trabajos. Perdona. Pero creo que cuando se desenrede la madeja todo será más fácil. Por ahora haré solo lo que tú hables mejor para mí. Aunque haya apelaciones, estas serán redirigidas a ti". Apenas un mes después, el embajador confiesa: "Tus cartas en el sentido de horrorizarme sobre mis anteriores compromisos no cumplen su objetivo porque ya estoy bastante horrorizado (...) Mientras duren los entuertos que tendrás que ir arreglando poco a poco, tendrás que tener un pellejo de rinoceronte. Ese editor sueco es un fresco de marca mayor. Se comprende que esa concesión que hice para la traductora era por una sola vez y lo demás es sencillamente estafa. No es el único editor que merecería ser procesado. Te recomiendo que a Bellini lo trates con guante de seda. Estoy de acuerdo con tu porcentaje y tu control, pero debes recordar que él nunca me quiso cobrar porcentaje, a pesar de mi insistencia. Esto merece un trato especial". Balcells prosigue la representación del poeta tras su fallecimiento.

MIGUEL ÁNGEL ASTURIAS "Nuestra palabra es mayor"
El autor de El señor presidente recibió el Nobel en 1967. Fue el primero de la larga lista de latinos en manos de Balcells que recibirían el máximo galardón literario del mundo. Además de parquedad, Asturias no parecía sobrado de humor. El 21 de diciembre de 1973 escribe desde París, donde había sido embajador durante cuatro años: "Le contesto de inmediato para que no dé usted más pasos con la editorial Lumen, que parece no darse cuenta que se trata de un libro escrito por dos premios Nobel. En principio, más por Pablo, que ya no puede opinar [Neruda fallece ese año], que por mí, no me gusta ir en una colección que se llama Palabra Menor. Nuestra palabra siempre ha sido mayor de edad".

JUAN CARLOS ONETTI "Vio a un anciano decrépito"
El escritor uruguayo cayó en brazos de Carmen Balcells a principios de 1970, aunque ambos no se conocerían hasta el verano de ese año en Montevideo. Tras el encuentro, el autor de Cuando ya no importe le escribió el 13 de noviembre: "En primer lugar es mentira. Usted nunca vio a Onetti sino a un anciano decrépito, semidestruido por los antibióticos y enfundado en una cama que los buenos novelistas calificarían de dudosa limpieza y que yo prefiero llamar mugrienta. Será para otra vez". Un año después, tras recibir la liquidación de Salvat, escribe con tierna ironía: "Acabo de recibir su carta del 5 de agosto, una de las más bellas que me haya escrito jamás una mujer". A comienzos de 1974, con la dictadura enraizando en Uruguay, la agente anima a Juan Carlos Onetti y su esposa, Dorotea Murh, a instalarse en España, algo que finalmente ocurriría: el autor murió en Madrid en 1994. Como en otras ocasiones trata de vencer los escollos económicos y, al tiempo, salvaguardar la autonomía del escritor. "Yo reitero mi ofrecimiento de ayudaros a financiar vuestra estancia en España y tened la seguridad de que en el momento en que decidierais venir, encontraría la fórmula mágica para que el dinero saliera de alguna parte, ya que no me parece conveniente hipotecarse con un editor ni venderle un libro que todavía no está terminado", escribe la agente. Onetti se demora lo suficiente para ser encarcelado durante meses en Uruguay tras haber premiado como jurado un cuento considerado pornográfico y subversivo por la dictadura. Su mujer escribe a Balcells el 19 de marzo de 1974: "Juan sigue en el sanatorio, detenido (...) Te manda un gran abrazo, anda mal (que es su estado normal, dirías tú), pero multiplicado por cien. Dios sabe qué novelón deprimente le saldrá después de esta".



** ** **


EL PAIS

Madrid - España
17 de noviembre de 2011

 

El tesoro documental de Carmen Balcells

Fotos:: ARCHIVO BALCELLS / AGA / MINISTERIO DE CULTURA

01 Neruda: "Te doy incalculables trabajos"

Son 2.000 cajas de documentos inéditos que dan testimonio de la historia íntima de la literatura en español en el siglo XX. EL PAÍS se sumerge en el archivo de la agente literaria Carmen Balcells, comprado en 2010 por el Ministerio de Cultura por tres millones de euros. Este primer documento es una carta manuscrita de Pablo Neruda. El chileno, ya embajador, ya premio Nobel (1971), seguía siendo sensitivo como buen poeta. En esta misiva, escrita desde su refugio en La Manguel, Normandía, en marzo de 1972, se excusa ante la agente por los trastornos que le genera su representación. "Creo que cuando se desenrede la madeja todo será más fácil".

 

02 Gabísimo, te quiero muchísimo"

Balcells y García Márquez no solo son agente y representado. Su amistad es estrecha. En este fax de mayo de 1992, Carmen Balcells le anuncia "rosas rojas para recibirte el lunes" y "pruebas limpias con la incorporación de las cositas que me diste por teléfono".

03 Biblioteca universal de García Márquez

La agencia guardó ejemplares de todas las ediciones de las obras del Nobel colombiano, uno de los autores más traducidos del mundo. Esta es la cubierta de la versión coreana de Crónica de una muerte anunciada. Hay 700 cajas con la llamada "biblioteca secundaria" de García Márquez en el fondo Balcells.



 04 ‘El amor en los tiempos de cólera' pasa por corrección

La que sería "biblioteca primaria" de García Márquez está formada por los originales de sus obras y sucesivas versiones. Balcells ha conservado algunas de estas piezas y ha cedido otras. Se especula con que la primera versión de Cien años de soledad está en manos de un amigo del escritor que está tratando de venderla. Esta es una versión de 1985 de El amor en los tiempos de cólera, la historia protagonizada por Fermina Daza y Juvenal Urbino.
 

05 Billetes a Estocolmo para el Nobel

4.190 dólares costaron los pasajes de avión del autor de Cien años de soledad y su esposa desde México a Estocolmo, con escala en Madrid, para asistir a la ceremonia de entrega del Nobel en diciembre de 1982

 

06 Isabel Allende pide "silencio" para escribir

Las cartas entre la autora de 'La casa de los espíritus' y su agente desprenden ternura por los cuatro costados. En esta tarjeta navideña, Allende pide para el próximo año "silencio y tranquilidad para escribir aunque para eso tenga que asesinar a Scott, mocoso de mierda". El vitalismo de la autora salta casi de cada palabra.





07 Un Pantaleón domestico y anónimo
Esta ilustración, de autoría desconocida, acompañaba el manuscrito original de 'Pantaleón y las visitadoras', de Mario Vargas Llosa. En 1970 el escritor peruano había nombrado agente a Balcells, que fue una de las artífices del traslado del autor a Barcelona para que se dedicase en exclusiva a escribir tras el éxito de sus primeras novelas.


08 No y no. Cela y García Márquez no cobrarán la mitad.
Carmen Balcells es dura negociadora. Pelear por sus autores es pelear también por su porcentaje (10%). Pero ella dignifica la vida de los escritores, acostumbrados a firmar contratos vitalicios y recibir casi lo que quisieran pagarles. Este telegrama enviado a la editorial Bruguera en 1982 muestra a Balcells dando un puñetazo en la mesa: "¿O es que los fabricantes de papel os regalan la mitad para promociones?".

09 La detención de Onetti en la dictadura

Dorotea Murh, esposa de Juan Carlos Onetti, escribe a Balcells durante la detención de su marido tras el golpe militar de Uruguay. Onetti había participado en un jurado literario que premió a un cuento considerado pornográfico y subversivo por la dictadura. Balcells les anima a trasladarse a España y les ofrece apoyo económico.




Comentarios
  • 7 Igor Gromow - 17-11-2011 - 12:55:09h
Hola, a mi punto de vista el mercado de derechos de la propiedad intelectual es un freno gigante para el desarrollo humano. Los secretos son el freno más. Señora Balcels, vivimos en el siglo 21, sus cuentos de la dueña de un prostíbulo ya pasaron de moda. Saludos a todos los escritores!
  • 6  Pepe - 17-11-2011 - 12:37:30h
Tomás, toda propiedad intelectual tiene fecha de caducidad. Estos documentos serán de un valor incalculable dentro de unos cuantos años. Seguro que cualquier universidad americana hubiera pagado mucho más por tener esta joya.
  • 5  Tomás - 17-11-2011 - 12:23:38h
¿Cómo es posible que el Ministerio de Cultura pague 3 millones por algo no se puede vender? Una parte importante de lo contenido en el archivo está protegido por la ley de protección de datos, la otra por la ley de propiedad intelectual. Insisto, ¿cómo es posible que se permita la venta y comunicación pública de documentos que afectan a terceras personas?
  • 4  GHL - 17-11-2011 - 11:49:38h
@ Hamabost Los folios no se extienden en horizontal sobre el suelo, sino en vertical.
  • 3 Aureliano Buendia - 17-11-2011 - 11:48:26h
García Márquez publico Los cuentos de la Mama Grande en 1962, y no conoció a Balcells hasta 1965. O sea que es imposible que lo de Mama Grande sea por Balcells. Es una mitificacion posterior...
No hay un político que haya hecho tanto por varias generaciones como esta Nana de las Letras. La literatura es la mejor crianza y mejora a las personas, las personas hacen los países...lástima que los lectores voraces sean siempre los mismos, y los consumidores estén olvidando que los libros caben siempre en casa, encima, debajo o al lado del ordenador, de la tele y de toda esa cacharrada, complementaria pero no sustitutoria del libro (sea en papel o en una pantalla). ¡Ñam, ñam, lectura, lectura, qué rica!
  • 1  Hamabost - 17-11-2011 - 10:58:28h
2000 cajas - 2,5 km: 1,25 m por caja de documentos, es decir ¿4 folios por caja?

No hay comentarios: